¿Quién no compara precios a la hora de realizar la compra? La verdad y más aun en los tiempos que corren siempre intentamos buscar ese equilibrio entre calidad-precio y buscar el mayor ahorro la hora de llenar nuestra cesta. Pero ahorrar a la hora de cocinar no sólo tiene que ver con los precios de los alimentos, también tenemos que contar con el gasto energético que supone el proceso culinario; cocinar, lavar los platos, mantener los alimentos en prefecto estado… Así que para ayudarte a a cocinar de manera más eficiente te vamos a dar algunos consejos para que disfrutes de tu cocina minimizando el gasto y reducir la factura de la luz.
6 formas de hacer una cocina más eficiente
Conservar los alimentos
Una vez volvemos de realizar la compra, es el frigorífico el encargado de preservar nuestros alimentos en las condiciones más óptimas. Las claves para ahorrar energía son las siguientes:
- Mantener la temperatura a niveles adecuados: 5 grados para la nevera y -18 para el congelador. Algunos modelos dispone de la función “eco” para que nos sea más fácil cuidar este aspecto.
- No colocarlo ceca de fuentes de calor.
- Es recomendable esperar a que la comida se enfríe antes de guardarla.
- Mantener la parte trasera el frigo limpio y sin polvo para mejorar su ventilación.
- No mantener la puerta abierta demasiado tiempo.
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La mejor placa
Si hablamos de ahorro, la mejor opción es a la placa de gas. Es muy importante que en este tipo de cocinas los quemadores estén siempre limpios. El color de la llama debe ser azul, lo que implica que la combustión es correcta.
Si lo que buscamos es mayor comodidad a la hora de cocinar, lo mejor es decantarse por una cocina de inducción ya que puede llegar a consumir un 20% menos de electricidad que las vitrocerámicas convencionales.
Menaje de cocina
Otro aspecto a tener en cuenta es el uso correcto de sartenes, ollas y cacerolas. Es importante es que utilicemos el recipiente con un diámetro igual o ligeramente superior al de la zona de cocción.
Además si optamos por cocinar en una olla, la cocción es más rápida y consume menos energía, especialmente si colocamos la tapa.
Otra forma de ahorrar energía es apagar el fuego unos minutos antes para aprovechar el calor residual.
El horno
Para hacer un uso eficiente del horno podemos seguir las siguientes pautas:
- No esperar a apagarlo cuando la comida esté hecha es mejor aprovechar el calor residual y apagarlo antes para que se termine de cocinar.
- No abrir la puerta mientras el horno esté en funcionamiento ya que la temperatura disminuye mucho.
- No usarlo para calentar comida o descongelar. El gasto es muy elevado.
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El microondas
El microondas ahorra más energía que el horno. Para sacarle partido, es mejor utilizar recipientes de vidrio y cortar en trozos los alimentos para que el proceso sea más rápido.
No usar agua caliente para descongelar
Descongelar con agua caliente implica gastar muchos litros de agua. Es mejor prevenir y sacar el alimento a congelar con tiempo y deja que lo haga dentro de la nevera.
El lavavajillas
El uso del lavavajillas podemos ahorrar una media de 30 litros de gua al día. Es aconsejable esperar a que se llene para ponerlo en marcha y usar bajas temperaturas ya que la mayor parte del consumo de este electrodoméstico es debido al calentamiento del agua en el proceso de lavado.
Nuestro último consejo es que a a hora de comprar un electrodoméstico nos fijemos en el etiqueta energética. Merece la pena decidirnos por productos más eficientes ya que el consumo de energía de un aparato prácticamente idéntico en prestaciones puede ser casi tres veces mayor en los electrodomésticos de la clase G que en los de clase A.
