En una industria donde los acabados brillo o “glossy” han dominado las tendencias años tras años, era algo difícil buscar y encontrar ciertas alternativas, aun así, los tiempos y las modas cambian rápido. Esto ha permitido que otros acabados como el mate se hayan abierto paso, prometiendo numerosas ventajas y nuevas posibilidades.
El acabado mate promete terminar con los principales inconvenientes del brillo, tales como las marcas de huellas y dedos, la fragilidad frente a ralladuras o arañazos, el exceso de suciedad y su dificultad de limpieza.
Ventajas del acabado mate
Si por algo se ha convertido en tendencia el acabado mate es por sus numerosas cualidades que ya hemos citado anteriormente, todas muy útiles para superficies donde cocinamos, usamos cuberterías afiladas y manipulamos todo tipo de alimentos. Además hay que añadir la resistencia a los productos de limpieza más abrasivos, lo que facilita su desinfección sin temor a dañar las superficies.
También hay que destacar que gracias a su tecnología de fabricación son superficies aún más resistentes al calor seco y húmedo, lo que para una superficie encimera donde se cocina, es ideal.
La clave está en los detalles
No solo de cualidades vive el acabado “Mate”, también debemos tener en cuenta su flexibilidad para otorgarnos una gran variedad de colores y tipos de superficie. Esto lo convierte en un material ideal para decoradores, interioristas y fanáticos del diseño.
Podemos encontrar acabados mates en:
- Color calabaza
- Mármol
- Cobre
- Titanio
- Grafito
Lo que le da una flexibilidad y facilidad para conseguir buenos resultados en todas las composiciones que imagines o que un diseñador idee, otorgando una mayor libertad artística para su uso.
Que el acabado mate se haya impuesto al brillo/”glossy” no es extraño, su desarrollo tecnológico, su durabilidad y resistencia, sumados a las posibilidades que otorga en cuanto a diseños y decoración lo hacen merecedor del trono que hasta hace poco ostentaba el acabado brillo.
